Universidad de Puerto Rico, Rio Piedras
Natalia M. Romero
Darlenis Mariano
Karla Medina
Alexandra Núñez
Olga Orejuela
Wilmari Villafañe
{May 20, 2008}
Investigación de Objetivo Fama
{May 20, 2008}
Fotos de Anaís
Primera Gala
Sexta Gala
Premios Lo Nuestro
Video de Anais
{May 20, 2008}
La Construcción del Artista en Objetivo Fama: Anaís
El Reality TV Show se define como un género de la televisión que presenta situaciones de humor, drama y eventos reales con gente común y corriente, en lugar de actores. Aunque el género no es necesariamente nuevo pues, ha existido de alguna manera u otra desde los comienzos de la televisión, el término está estrechamente ligado al siglo XXI, momentos en el que se ha popularizado mayormente este fenómeno contemporáneo. Cabe mencionar que los programas de tipo documental y noticioso no caen bajo este género televisivo.
El Reality TV ha sido el género más revolucionario, con una tendencia televisiva muy alta. Este género vino para quedarse, hay que verlo como una manera de vivir contemporánea. Es un formato de televisión de moda, el objeto de crítica preferido y el mecanismo de obtener esos “15 minutos de fama”. El Reality es altamente adictivo por las situaciones banales y simples pero, igualmente, “entretenidas”. Sin lugar a duda este tipo de programación es una documentación televisada de la vida como la conocemos, por medio del cual se puede lograr un tipo de fama.
Un fragmento de El Compendio de Moral Salmanticense (XX, 2.1), establece: “Según la definen los teólogos: fama es clara notitia, quam alii de nobis habent”. Esta noticia debe, principalmente, ser de una vida virtuosa y ordenada, que es la materia de la verdadera fama; y secundario de las demás cosas, que los hombres suelen estimar, como de sabiduría, ingenio, valor, y semejantes.
El programa Objetivo Fama catalogado como “Reality Show” por su concepto, comprende un concurso vocal latino que se lleva a cabo en Puerto Rico, producido por Soraya Sánchez junto a Ender Vega, para Univisión Puerto Rico. El mismo es transmitido por la cadena de televisión hispana Univisión, los sábados a las 8:30 de la noche. El concurso consiste en el escogido de 20 concursantes entre las edades de 18 a 28 años. Estos jóvenes pasan a vivir juntos a una casa\estudio por varios meses, mientras participan de una gala semanal en la que uno de ellos queda eliminado de la competencia. Durante estos meses, los concursantes son asistidos por maestros de canto y baile, estilistas, diseñadores de vestuarios, entrenadores personales, etc., en la casa\estudio para ayudarlos a mejorar su imagen, presencia escénica y talento. Los concursantes son evaluados por un panel de jueces que se deja llevar por el desempeño vocal y dominio escénico del artista. A raíz de esto, el jurado “amenaza” a tres concursantes en cada gala, siendo uno el eliminado del programa semanalmente. Los televidentes, con sus votos, son los responsables de decidir qué concursante amenazado se va o se queda en la competencia. Como expone Charo Lacalle en El Espectador Televisivo, “En plena expansión de los modelos políticos y liberales, la participación del espectador convierte al individuo en el epicentro de la programación y en coautor de los programas en lo que participa”. En otras palabras depende exclusivamente de la audiencia, el desarrollo, la permanencia y la llegada al estrellato del artista a través de Objetivo Fama.
La lucha de un aspirante artista a llegar a la fama y convertirse en aquel ídolo de millones y millones de fanaticada, no siempre ha sido igual. En esta nueva era en que vivimos, donde satélites transmiten señales televisivas y radiales a todas partes del mundo, se han creado programas televisivos en donde el aspirante ya no tiene que sobrepasar tantos obstáculos como originalmente le tocaba en un pasado. De esta manera y según un artículo en la página de internet http://univision.com/objetivofama, Desarrollo de la fama, “A medida del pasar del tiempo desaparece el descubrimiento del artista y se da un nuevo paso a la construcción del artista en cambio.”.
A partir de estos sacrificios y la participación de la audiencia en el “Reality Show”, entra en vigor un aspecto crucial en la construcción de la fama, el Performance. En el texto de Antonio Prieto, En Torno a los Estudios del Performance, la Teatralidad y Más, Yolanda Muñoz propone una definición que plantea el performance como “una esponja mutante y nómada”. Según Prieto, la analogía de la esponja corresponde porque absorbe todo lo que encuentra a su paso; la lingüística, las teorías de la comunicación y de la conducta, la antropología, el arte, los estudios escénicos, los estudios de géneros, y ahora los estudios post-coloniales. En el texto el autor establece que este arte “…es mutante gracias a su capacidad de transformación en una hueste de significados escurridizos…; Por otro lado es nómada ya que, se la ha visto viajar sin necesidad de pasaporte de una disciplina a otra y también de un país a otro.”.
Con estos planteamientos se aprecia la amplitud de vertientes que tiene la palabra “performance”. Asociado a los Reality Shows además de a diversidades de actividades humanas partiendo de sus orígenes teóricos, Performance proviene del latín “per-formare” (realizar), para con el paso de los siglos denotar; desempeño, espectáculo, realización, ejecución musical o de representación teatral.
R. Schechner tiene sus propios pensamientos sobre este tipo de representaciones; el campo de estudio del performance cambia constantemente pero abarca cualquier tipo de actividad humana desde el rito, el juego, atraviesa por el deporte, los espectáculos populares, las artes escénicas, así como actuaciones de la vida cotidiana, entiéndase los diferentes eventos sociales, la actuación de roles de clase, género, los medios masivos y hasta el Internet.
A grandes rasgos se puede establecer que la construcción de la fama de los concursantes en el programa televisivo Objetivo Fama es afectada por diferentes factores, en gran medida, todos fríamente controlados.
Esta disciplina también nos permite estudiar desde otros ángulos, fenómenos socioculturales derivados de la globalización. Diferentes evaluaciones han concluido que el performance está vinculado con el post-modernismo. Éste abrió campo para “lo híbrido, lo fragmentario, la revaloración de lo marginal, de lo agonístico y lo lúdico”, según Johan Huizinga expone en su texto The Play Element Un Culture. El llamado post-modernismo trae consigo la búsqueda del poder en las relaciones humanas y sociales, en el control y disciplina del cuerpo, por esto está vinculado al performance, pues este arte implica esos procesos que involucren a un actor social, sin importar si es una situación artística o cotidiana. Se trata de alguien que ve, juzga y desea e interpreta ese actor. En el performance se pueden encontrar y analizar esas relaciones de poder en acción; ver y ser visto.
Gran parte del proceso de leer y significar el texto televisivo por parte del tele-espectador es influenciado por la imagen,
“Mas allá de las diferencias temáticas y expresivas entre los diferentes géneros y formatos de la televisión, la reiteración del punto de vista individual, pone de manifiesto el deseo del medio de identificarse con su público, o mejor dicho de convertir al espectador en eje indiscutible de su imaginario comunicativo por medio de las imágenes presentadas.”
, como explica Charo Lacalle en su texto, El Espectador Televisivo. La identificación del público con el discurso televisivo del programa, en gran medida, es impactada y afectada por el lenguaje visual de la imagen.
Todo lo de carácter performativo permite el análisis de la construcción social de la realidad, donde cabe mencionar la teoría constructivista de Hall, la cual expone que los significados se construyen culturalmente. En la misma, podemos ver cómo el significado de la creación de la fama se va construyendo por medio de conceptos y signos. Éstos abarcan lo que son el artista en todos los aspectos y su desarrollo ante el público. En Objetivo Fama, al igual que en la teoría, no sólo lo material es lo que da el significado, sino el sistema del lenguaje y esos artistas quienes utilizan sus mapas conceptuales, su conocimiento en música y cultura, su voz y la lingüística para construirlos. De esa manera darle vida y significado al propósito del programa, las metas del artista, las opiniones del espectador y, consecuentemente la obtención de una fama.
Uno de los ejemplos de la construcción del artista es Anaís, participante ganadora de la segunda edición de OF. En su participación a través de este concurso, se dieron varios procesos artísticos que la ayudaron a desenvolverse como una verdadera artista. Anaís, parte dominicana y parte “neoyorquina”, comenzó su transcurso en OF mediante su audición. La misma consistía de tres eliminatorias para entonces formar parte de los escogidos. Luego de que fue escogida, estuvo un tiempo de tres meses en la casa/estudio. Como mencionamos anteriormente, durante estos meses, Anaís fue asistida por maestros de canto y baile, estilistas, diseñadores de vestuarios, entrenadores personales para ayudarla a mejorar su imagen, presencia escénica y talento. Todos estos elementos son importantes de la construcción del artista. Por ejemplo, las galas semanales son las pruebas de progreso. Todo el trabajo que pasan en la casa/estudio se refleja en ese espectáculo. Desde la interpretación de la canción, la voz y el vestuario del artista. Entre estos elementos a través de la competencia se dan los cambios de imagen, cambios en la postura, dicción y maneras de hablar, las mejoras en su persona y el crecimiento de aprecio y apoyo del público, o sea, la fama.
En Anaís, se dieron tres cambios muy notables: forma de vestir, forma de expresarse y el cambio de imagen. A los principios de la competencia pudimos ver a una muchacha común, vestida con ropa casual, tatuajes, “body piercing” y un vocabulario algo limitado (ordinario). Ejemplos de vestuario podemos poner la diferencia entre su vestimenta exótica de audición y su cambio a una imagen más comercial.
La vestimenta es un factor esencial al “vender” la imagen de una artista. Su vestimenta también debería ir acorde con el genero musical. Es importante mencionar que la vestimenta forma parte de la identidad del artista de manera que la fanaticada se identifica.
Otro cambio en Anais fue su mejora al modo de expresarse. Ella progresó en su dicción y en su proyección vocal. Su cambio de imagen consistió en eliminar sus “piercings”, acondicionarle el pelo, pintárselo, perfeccionar el maquillaje, lentes de contacto y vestimenta adecuada para cubrir sus tatuajes.
En la rama artística nunca hubo duda, pero esa parte no es lo único que aplica al construir un artista. A través de la competencia, Anaís se ganó el apoyo del público por su carisma, por su furor y su entrega al interpretar. Ademas, con su travesía de cambios al ser “construida” fue más el progreso.
Anais, a raíz de haber ganado esa edición de OF, ganó un contrato de “record discográfico” con la compañía de Univision, lo cual aumenta mas la construcción de la artista ante el publico. Anaís logró una producción discográfica que se lanzó el 14 de abril de 2006. A raíz de la publicidad y la imagen que presentaron de ella, además de darle forma a su carrera, hicieron que se diera a conocer, llegando entonces a la fama. Su álbum, “Así Soy Yo”, tuvo alrededor de cinco nominaciones a los premios Billboard. Todos estos procesos seguirán aportando a la construcción de ella, o sea, siempre se está trabajando para mejorarla de cualquier manera.
En conclusión, podemos considerar que la construcción del artista ha sufrido cambios radicales gracias, en su mayoría, al crecimiento tecnológico de los medios de comunicación. Como expone Jean Baudrillard en su ensayo el Extasis de la Comunicación, la saturación de los medios y por ende, el crecimiento acelerado y la demanda cada vez más exigente y enjuiciadora del espectador por el producto final, crean fenómenos como el programa televisivo examinado en este ensayo. La fama de muchos artistas en la actualidad es construida y no necesariamente obtenida por el talento innato de la persona.
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Objetivo Fama: Anaís 